La concentración mental implica enfocar completamente la atención sobre el objeto elegido, durante un periodo de tiempo determinado, evitando la dispersión mental. Planteada como una forma de meditación, es preciso que la mente adopte una actitud receptiva, evitando cualquier tensión.
Además de fomentar una mayor capacidad perceptiva, propicia que la mente se aquiete, el cuerpo se relaje y la respiración se haga más lenta y profunda.
Te proponemos practicarla mientras miras el siguiente vídeo. La gran capacidad de concentración que en él muestra la bailarina Miyoko Shida te va a ayudar. Cuando finalice, puedes cerrar los ojos durante un par de minutos y observarte; tu estado interior será muy distinto al que tenías al comienzo del visionado.